PROPIEDADES DE
NUESTRA MADERA

Un lujo de la naturaleza…

Trabajamos con las mejores calidades de madera estructural, desde el pino o abeto rojo finlandés, abeto austriaco…ya que sus condiciones climáticas extremas obligan a los árboles a un crecimiento lento. De esta manera la madera presenta anillos más estrechos y la densidad de su fibra aumenta, lo que hace que los troncos sean muy flexibles y resistentes.

Nuestra materia prima proviene de bosques bien gestionados (principios de reforestación sostenible).

Ofrecemos la máxima Garantía y Seguridad ya que disponemos del Marcado C.E. en todos nuestros sistemas constructivos y utilizamos la tecnología más avanzada para la fabricación de nuestras construcciones.

«La Tierra no es una herencia de nuestros
padres, sino un préstamo de nuestros hijos.»

PROVERBIO INDÚ

PROTEGE DEL FRÍO Y DEL CALOR

Debido a su estructura celular la madera nos protege del frío y del calor, actuando como excelente aislante térmico evitando cambios bruscos de temperaturas. Con el mismo grosor, el aislamiento térmico de la madera es cuatro veces superior al del ladrillo.

AÍSLA DEL RUIDO

Gracias a su composición en lignina y celulosa, la madera nos aísla del ruido, ya que absorbe una parte importante de la energía de las ondas que recibe, con la consiguiente reducción de la polución acústica y fenómenos como por ejemplo, la reverberación.

REGULA LA HUMEDAD RELATIVA

Por su estructura porosa, la madera tiene la capacidad de absorber la humedad del ambiente, lo que nos permite regular la humedad relativa y la temperatura de nuestros espacios creando ambientes más saludables.

PROPORCIONA CONFORT

Gracias a que es un material orgánico, percibimos los espacios  con madera como naturales, relajantes y tranquilos, algo que nos aporta un confort subjetivo de gran calidad, influyendo así también de forma beneficiosa en nuestra salud.

DURABILIDAD CONSTRUCTIVA

Su alta densidad propicia que soporte mejor las inclemencias del tiempo y sus propiedades se conservan intactas. La vida útil de la madera supera el siglo mientras que otras construcciones como el hormigón no superan los 70 años.

RESISTENCIA AL FUEGO

Debido a su baja conductividad térmica la madera ofrece una gran resistencia al fuego. En caso de incendio la capa exterior se consume lentamente, se carboniza y actúa como protección resistiendo deformaciones y el colapso mejor que el acero y el hormigón.

ESTABILIDAD ESTRUCTURAL

Utilizamos una madera que nos ofrece unas propiedades mecánicas óptimas para la construcción de estructuras estables y resistentes. Nos permite reducir el volumen de cimentación.

SIN PUENTES TÉRMICOS

La madera evita los puentes térmicos ya que es un mal conductor por lo que no transmite ni el calor ni el frío del exterior dentro de la vivienda.