Estamos orgullosos de que en el portal web polaco Inzynieria han destacado nuestras construcciones, en particular la Casa Sophia y nuestro proyecto de construcciones sostenibles. Agradecemos que los proyectos que llevamos a cabo tengan visibilidad tanto dentro como fuera de España
Os traducimos a continuación lo que escriben de nosotros:
Las Pirámides de Egipto, el Empire State Building en Nueva York y la Torre de Pisa en Italia son ejemplos de actividades humanas que han dejado su huella en la historia. Hoy, sin embargo, el sector de la construcción deja atrás algo más que edificios. Este sector consume casi el 55% de la electricidad mundial y, por lo demás, aporta casi el 40% de las emisiones totales de CO2 del mundo.
Dado el impacto ambiental de esta industria, las medidas para reducir u optimizar el consumo de energía de este segmento nos ayudarían a reducir el impacto negativo en el planeta. Una de estas actividades son las auditorías energéticas realizadas según lo propuesto por el proyecto de la UE INNOVEAS.
La mayoría de las personas sueñan con tener una casa propia. 100×100 Biopasiva es una empresa española especializada en la construcción de viviendas y edificios biopasivos de alta eficiencia energética y bajo consumo energético. Dado que la biopasividad también significa el uso de solo materiales de construcción 100% naturales, estas casas encajan perfectamente en la estrategia de proteger nuestro planeta.
La empresa fue fundada en 1994, desde entonces trabaja para conseguir un nivel mínimo de consumo energético en los edificios construidos, y desde 2014 cumple con el estándar de eficiencia energética más exigente, Passivhaus. Como explica Raquel Peláez, gerente de 100×100 Biopasiva, para nuestra nueva casa piloto, Casa Sophia, nos enfocamos en la máxima eficiencia energética y logramos la máxima durabilidad del edificio. Para ello hemos obtenido varios certificados y marcas de calidad. En primer lugar, hemos obtenido el certificado PASSIVHAUS PREMIUM porque será una casa pasiva que generará más energía de la que consume. A continuación, recibimos el certificado SELLO AMBIENTAL VERDE con los cinco niveles posibles y una puntuación del 92%. Finalmente, hemos recibido la certificación de calidad RECYCLE y ZERO WASTE SEAL al tratar y reutilizar el 100% de los residuos de obra. Debido a todas estas características «verdes», esta casa tiene muchas posibilidades de convertirse este año en la vivienda más sostenible de Europa.
El camino hacia la eficiencia energética no parece tan difícil después de identificar cuidadosamente los procesos que podrían mejorarse de antemano. Según Jure Kristana, gerente sénior del equipo de Komunala Kranj doo, las medidas de mejora de la eficiencia energética no son difíciles de implementar. Es importante identificar primero los procesos y áreas que no son efectivos y encontrar soluciones que mejoren la situación. Si la solución propuesta ahorra energía y es financieramente beneficiosa a largo plazo, no debería haber problemas con su implementación. La empresa eslovena inició sus operaciones en 1990 y desde entonces la eficiencia energética ha sido parte de su estrategia. Hasta la fecha, la empresa ha mejorado los sistemas de bombeo, el sistema de calefacción e instalado un sistema de gestión de energía. La empresa también ha cambiado a iluminación LED y utiliza vehículos que ahorran energía y produce su propio biogás a partir del sistema de alcantarillado. Si bien las actividades, como las descritas anteriormente, por ejemplo, requieren una inversión inicial significativa, existen formas de minimizar su impacto oneroso en sus finanzas. Por ejemplo, la empresa constructora italiana Appennino Building Cooperative, explica Massimo Trabucchi, miembro del consejo de administración, antes de tomar medidas en el campo de la eficiencia energética, estima sus costos y establece un cronograma para todo el proyecto para que pueda pagar gradualmente la inversión. Implementaron un sistema de gestión de la energía conforme a la norma ISO 50 001 para ahorrar y reducir las pérdidas de energía, realizaron una auditoría energética para comprobar el rendimiento de sus sistemas y obtuvieron la certificación EMAS (Eco-Management and Audit Scheme). También utilizan transporte eléctrico y adicionalmente instalaron paneles fotovoltaicos en los techos de las bodegas para asegurar el autoabastecimiento energético.
Las pymes del sector de la construcción, dado su papel clave en el consumo energético, son un ejemplo de que un futuro diferente es posible donde ser más eficientes energéticamente nos hace más saludables a nosotros y a nuestro planeta.